La Soberanía de Dios

Muchas veces nos preguntamos porque algunas cosas suceden de una manera y no de otra o porque Dios no hace las cosas de la manera que pensamos que deben ocurrir; entiendo que todas las respuestas las podemos encontrar en la Soberanía de Dios.

Soberanía significa: derecho que tiene el soberano, siendo este la excelencia, la máxima autoridad o la alteza suprema y absoluta que tiene autoridad sobre todo lo demás, es el que está por encima del resto.

Esta poderosa cualidad de Jehová la podemos encontrar claramente explicada en el libro de Job Capitulo 38 donde Dios explica a Job porque él es el soberano del universo; sencillamente porque el creo todas las cosas y nadie puede conocer y manejar mejor el universo que aquel que lo creo.

Muchas veces cuestionamos a Dios simplemente porque no aceptamos su soberanía, su señoría sobre nuestras vidas.

Si aceptamos la soberanía de Dios entendemos que no existe un criterio o punto mayor que El de este por el cual se puede juzgar; que él tiene el derecho de decidir sobre nuestras vidas o situaciones y que debemos someternos a su autoridad y cuidado porque él no se equivoca o cometer errores.

No existe situación, persona, país o poder por encima del Dios creador del universo; él es el principio y el fin, el Alfa y Omega, el Gran Yo Soy.

Por eso debemos apelar a El ante cualquier situación y estar dispuesto a obedecer y aceptar su soberana voluntad.

En Isaías 55.8-10 la palabra explica que sus pensamientos y sus caminos no son igual que los nuestros, por esto debemos busca dirección de Dios y esforzarnos para poder encajar en sus planes.

Confiemos en que el soberano tiene absoluto control de todo, Él sabe lo que hace, aunque no entendamos; Dios hará lo mejor para nosotros.